Hacer deporte con una prueba de esfuerzo previa, comer bien, descansar, llevar unos horarios … son detalles que están al alcance de cualquier deportista, sea o no de élite. Por eso vamos a descubrir como disfrutar del deporte sin ser profesional de manera sana.
Que el deporte es beneficioso para la salud ya no hay nadie que lo discuta, son numerosos los estudios científicos que lo demuestran. Pero, como en la vida, hemos de intentar hacer las cosas bien, al iniciar una actividad, la cual hace tiempo no practicamos, la mejor manera de iniciarla es despacio, con cargas leves y una intensidad media-baja, los mejores ejercicios para ello son caminar rápido, carrera, natación o bicicleta, si tenemos una limitaciones articulares, no dudemos en usar ayudas, pues así distribuimos cargas. Para mejorar nuestra adherencia a la actividad deportiva no olvidarnos de escoger algo que nos divierta y nos atraiga, además de poder realizar dicha actividad en grupo, será la única forma de no abandonar esta rutina que tantos beneficios nos aporta, no olvidarnos nunca de un calentamiento previo al trabajo físico que haremos y preparar a nuestro organismo para dicho esfuerzo. Es aconsejable un reconocimiento médico previo, con prueba de esfuerzo incluida en el caso que el deportista padezca factores de riesgo tales como, obesidad, hipertensión, dislipemia, etc.